dc.description.abstract | Tanto las habilidades cognitivas como las no cognitivas son recompensadas en el mercado laboral. Sin embargo, hay poco
evidencia sobre cómo estas habilidades se forman en el contexto de los países en desarrollo. yo estudio
la forma en que las habilidades cognitivas y no cognitivas se adquieren simultáneamente en la transición
desde la infancia hasta la adolescencia utilizando datos longitudinales de cuatro países: Perú, India, Vietnam
y Etiopía. Estimo una versión linearizada de la tecnología de formación de habilidades, vinculando las entradas
se observó de 7 a 8 años a los resultados observados a los 11 a 12 y de 14 a 15 años. Encuentro evidencia de autoproductividad
principalmente para las habilidades cognitivas y la productividad cruzada para ambos tipos de habilidades. Luego extiendo
la tecnología de formación de habilidades para tener en cuenta el papel del estado nutricional en la adquisición de
habilidades. El puntaje Z de altura para la edad de un niño se usa como indicador del estado nutricional. Para lidiar con el
endogeneidad de la nutrición, esta variable se instrumenta utilizando un conjunto de choques domésticos seleccionados que
son específicos del país. Se encuentra que la altura para la edad es una entrada relevante en el modelo de formación de habilidades,
tener un efecto directo e indirecto sobre la acumulación de habilidades. Para obtener estimaciones de la
impacto a largo plazo de las inversiones nutricionales durante el período de la primera infancia en las capacidades posteriores, I
utilizar la evidencia obtenida de un segundo modelo que vincula la altura temprana para la edad a la capacidad cognitiva en
7 a 8 años. Al vincular los resultados de ambos modelos, encuentro que un aumento de 1 desviación estándar en
La altura temprana para la edad tiende a aumentar las habilidades cognitivas durante la adolescencia en un 6%, 9%, 17% y 7%
en Perú, India, Vietnam y Etiopía, respectivamente. También aumenta las habilidades no cognitivas en un 2% y
4% en India y Vietnam, respectivamente. Finalmente, pruebo la noción de complementariedad y encuentro que
la tasa de rendimiento de las habilidades cognitivas es considerablemente menor para los niños que tenían retraso en el crecimiento a mediados
infancia, mientras que la tasa de rendimiento de las habilidades no cognitivas permanece sin cambios. | es |